La motivación laboral hace referencia a la capacidad que tiene una empresa de mantener implicados a sus empleados para así alcanzar el máximo rendimiento y los objetivos empresariales marcados por la organización.
Debemos tener en cuenta que en una organización las motivaciones de cada persona pueden ser gestionadas de maneras muy diversas. Por lo tanto, aplicar un plan único no es la mejor opción.
Queremos hablarte de los incentivos laborales como fuente de motivación para tus trabajadores.
Es muy común pensar que incentivar laboralmente a un trabajador solo se puede conseguir mediante un aumento de sueldo. Ya son muchas las empresas se han dado cuenta de que la manera de incentivar laboralmente a una persona va mucho más allá.
Los incentivos laborales pueden agruparse en tres tipos:
Son aquellos que tienen efecto en el salario del trabajador. Además del sueldo mensual que están acostumbrados a recibir, podrán obtener una compensación extra.
Estos son algunos de los incentivos económicos más utilizados:
Ofrecer incentivos no económicos puede establecer cercanía entre la empresa y sus equipos, ya que, demuestran que la relación entre ambas partes va más allá de lo económico. Este tipo de incentivos se centran en el bienestar del equipo.
Algunos de los más populares son:
Los incentivos laborales en especies, también conocidos como retribución flexible, están cada vez más presentes en las ofertas de trabajo en España.
Este incentivo laboral es una aportación no dineraria pero valorable a la hora de calcular el salario total percibido. Las ventajas de este tipo de incentivo son en su mayoría fiscales, ya que tienen repercusión en el IRPF.
Algunos de los servicios o productos que se pueden ofrecer como retribución flexible son:
Un programa de incentivos laborales debe recompensar y reconocer a los empleados por alcanzar metas alineadas con los objetivos de la empresa, lograr hitos o simplemente por hacer un buen trabajo.
El equipo obtiene unos beneficios extra, y las organizaciones consiguen también un valor extra:
Está demostrado que los incentivos laborales mencionados en este artículo hacen que los empleados se esfuercen en alcanzar todas esa serie de metas que la empresa propone. Esto puede ser una manera eficaz de aumentar la productividad y el bienestar del equipo.
Las personas queremos trabajar en empresas en las que nos sentimos valorados y reconocidos por nuestro trabajo y aptitudes.
Por este motivo, es aplicable tanto a personas en busca de un nuevo puesto de trabajo como a personas que llevan muchos años trabajando en la misma empresa. Mostrar preocupación por el equipo puede aumentar su compromiso y motivación.
La mejora de la motivación y la lealtad reducen considerablemente los problemas de salud mental derivados del trabajo, lo que evita el absentismo laboral.
Numerosos estudios respaldan este hecho. Las empresas que muestran preocupación por sus equipos y tienen una buena política de incentivos presentan menor absentismo laboral que las que no.