Para que un equipo pueda desarrollar correctamente sus funciones, mantener el bienestar y ser productivo, debe existir un buen ambiente de trabajo.
Este buen clima laboral puede verse afectado cuando surgen conflictos y abusos entre los miembros del equipo.
Todos hemos oído hablar alguna vez sobre el mobbing pero, ¿qué es exactamente el mobbing laboral? La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el acoso laboral como el comportamiento agresivo y amenazante de uno o más miembros de un equipo hacia otro miembro en un entorno laboral. El objetivo de este acoso puede ser producir miedo, desánimo y desprecio a esa persona hasta que renuncie o sea despedida.
El mobbing tiene graves consecuencias a nivel psicológico: genera mucho estrés, baja autoestima, comportamientos sumisos e incluso depresión. En consecuencia, el rendimiento de una persona que sufra acoso laboral se verá muy deteriorado.
Prevenir la aparición de mobbing es más sencillo y eficaz que tratar de erradicarlo una vez se detecta. Os compartimos, 10 recomendaciones para poder prevenir su aparición y evitar que surja un ambiente tóxico en el equipo.
Es necesario tipificar qué conductas son consideradas acoso laboral y cuál será la actuación de la empresa en caso de que lleguen a producirse. Por otro lado, también es necesario estipular el objetivo de la empresa en este ámbito para poder evitar los comportamientos inadecuados entre compañeros.
A veces los casos de mobbing laboral se pueden evitar con una buena comunicación y una escucha activa entre compañeros y responsables de equipos. Para prevenirlo, la empresa debe establecer unos canales de comunicación adecuados para evitar conflictos.
Para conseguir una buena comunicación se debe intentar generar un ambiente de confianza y respeto.
Las personas que lideran equipos de trabajo son los primeros que deben tener una conducta ejemplar ya que sirven como referentes al resto del equipo. Una de sus funciones debe ser establecer un ambiente laboral basado en la confianza, seguridad y el respeto mutuo de todos los miembros del equipo.
Si el equipo observa conductas inadecuadas por parte de los responsables, puede que las reproduzcan con sus compañeros. Por eso es necesario fomentar un ambiente laboral seguro, agradable y positivo, en el cual nunca podamos perder la cordialidad.
Cada vez son más las empresas que se suman a realizar cuestionarios de manera habitual para medir el índice de satisfacción con el ambiente de trabajo. De esta manera, pueden detectar posibles carencias o problemas internos.
También se puede observar si hay diferencias de opiniones entre trabajadores y detectar dónde hay fisuras o asuntos a mejorar.
A veces no es sencillo detectar los posibles casos de acoso laboral. Para eso es importante establecer reuniones periódicas con el objetivo de identificar a tiempo las situaciones de mobbing o indicios que puedan derivar en él.
También serán necesarias reuniones para evaluar los resultados de las encuestas nombradas en el punto anterior para interpretar los resultados, decidir el procedimiento de actuación a seguir y si fuera necesario, reunirse con la persona o el grupo de personas involucradas.
Es recomendable que exista un protocolo de actuación en caso de acoso laboral para una rápida y correcta reacción ante indicios de mobbing.
Este protocolo debe tratar los siguientes puntos:
La empresa compartirá este documento con toda su plantilla y si es necesario, se convocará una reunión para su correcta explicación y transmisión a los miembros de la empresa.
En algunas empresas puede ser necesario implementar la figura del mediador. Este mediador será la persona encargada de gestionar las conductas no deseadas en la empresa y de acabar con ellas. También será la persona de confianza para que los miembros del equipo que estén sufriendo acoso puedan contárselo e iniciar el protocolo de actuación.
Todo el equipo debe estar informado y concienciado de la filosofía y las normas de la empresa en temas de acoso. Esta concienciación no surge mediante circulares, sino que se debe fomentar la interiorización de las normas para que estas se apliquen en el día a día.
Uno de los motivos que más tensiones causan en el trabajo son los procesos de promoción ya que es posible que varias personas estén interesadas en el ascenso. Luchar por los mismos puestos puede dar lugar a tensiones y conflictos internos que desencadenan en acoso.
La empresa debe llevar a cabo estos procesos de una manera totalmente objetiva y justa, estableciendo unos criterios transparentes que el equipo tiene derecho a conocer.
Numerosos estudios respaldan los beneficios que aportan las actividades entre los trabajadores fuera de la empresa. Estos son algunos de los beneficios más importantes: