Dicen los expertos en educación que aburrirse es necesario para fomentar la imaginación y la creatividad de niños y niñas. Seguro que recuerdas alguna tarde de verano sin nada que hacer, diciendo el clásico infantil “me aburro” a algún familiar que por respuesta te daba un “pues busca algo para dejar de aburrirte”.
Y lo buscabas, claro que sí. Así que vamos a volver a la infancia e intentar buscar maneras de reconectar con las ganas de trabajar y dejar a un lado el aburrimiento.
Si tienes criaturas cerca, sabrás que esta es uno de los estados que menos les gusta experimentar, pero no es algo exclusivo de la edad infantil. De mayores también nos pasa y es habitual que esto nos ocurra en el trabajo, donde pasamos gran parte de nuestro día. Y no nos engañemos, por muy prolífico que pueda ser para la creatividad, a nadie le gusta aburrirse.
Entonces, ¿qué podemos hacer si nos encontramos así en el trabajo? Las ganas no aparecen de la nada, por eso te dejamos algunas estrategias que pueden ayudarte.
No podemos hablar por la humanidad entera, pero nos arriesgamos a decir que no. Por mucho que te apasione tu profesión y que hagas cosas diferentes, siempre habrá algún aspecto que te resulte menos llamativo.
No a todo el mundo le gusta lo mismo. Aquí lo importante es encontrar tu equilibrio entre aquello que tienes que hacer, y te encanta, y aquello no te gusta tanto. Así, podrás mantener un nivel de interés y energía adecuado.
Es importante entender que estos niveles no serán constantes, en general. Y no solo porque haya partes de nuestro trabajo que no nos interesen tanto. De base, tendremos días que nos despertemos con más energía y otros con menos, y esto también influirá en nuestro lugar de trabajo.
Nuestro estado emocional también determinará que tengamos más o menos motivación y, si no nos sentimos a gusto en nuestro entorno laboral, habrá una tendencia clara al aburrimiento.
Así que si no te sientes bien en tu trabajo, es importante comunicar esta situación para poder tomar medidas que la mejoren. Escucha activa y comunicación transparente serán buenas aliadas.
Puedes tener tus propias estrategias. A cada persona le funcionará una cosa diferente, pero te dejamos aquí algunas ideas que podrás poner en práctica de forma individual:
Si te aburres en el trabajo, no desesperes. No serás ni la primera ni la última persona a la que le pase. Es algo habitual, sobre todo cuando las rutinas son muy rígidas y las tareas que desempeñas siempre las mismas.
Aplica estos tips y podrás mejorar tu energía y motivación en tu día a día.